El Puente de Gálata es una de las estructuras más importantes y representativas de Estambul, que además conecta dos orillas del denominado Cuerno de Oro. Todos los días es cruzado tanto por locales para ir a su lugar de trabajo como turistas para disfrutar de sus vistas.
En este artículo te contaré lo más importante del Puente de Gálata: su historia, las actividades que puedes realizar, curiosidades que lo rodean y consejos prácticos para disfrutar al máximo su recorrido. ¡Acompáñame!
Historia del Puente de Gálata
La historia del Puente de Gálata se remonta al siglo VI, cuando el emperador bizantino Justiniano ordenó construirlo para facilitar el comercio entre Constantinopla y las ciudades más cercanas. Desde entonces ha sido objeto de muchas reformas, de modo que el puente que conocemos hoy tiene su origen en el siglo XIX, durante el periodo otomano.
La versión actual, inaugurada en 1994 y cuenta con más de 400 metros de largo, por lo que es uno de los más largos y espectaculares de la ciudad. Conecta los barrios históricos de Karaköy y Eminönü, por lo que seguro que tendrás que cruzarlo en más de una ocasión durante tu viaje a Estambul.
A lo largo de los siglos, los comerciantes, pescadores y artesanos hacían de este lugar un gran mercado donde comprar todo lo necesario para la vida diaria. Hoy en día, la parte inferior del puente está repleta de restaurantes y cafeterías donde se puede tomar el típico café turco o un balık ekmek (bocadillo de pescado fresco) también muy conocido de esta zona.
Curiosidades del Puente de Gálata
Como te hemos dicho anteriormente, el Puente de Gálata actual ha sufrido muchas reformas, por lo que el que hay actualmente es la quinta versión. Cada una de sus versiones reflejó los avances de la época.
Además, en el siglo XVI, Leonardo da Vinci presentó un diseño para un puente que cruzaría el Cuerno de Oro aunque nunca se construyó. Más tarde, el sultán Solimán el Magnífico rechazó un diseño presentado por Miguel Ángel para el mismo propósito.
Qué ver y hacer en el Puente de Gálata
El Puente de Gálata es uno de los mejores lugares para tomar fotos panorámicas y disfrutar de las vistas de la ciudad. Pero el puente tiene mucho más que ofrecer y te lo voy a explicar a continuación:
1. Vistas impresionantes
Desde el Puente de Gálata las vistas son incomparables con ningún otro lugar o mirador de la ciudad. Por un lado, verás el casco histórico con sus mezquitas como la Santa Sofía y la Mezquita Azul. Por la otra zona podrás divisar la moderna Torre de Gálata. Si te gusta la fotografía y quieres hacerte con la mejor de todas te recomiendo que vayas al amanecer y el atardecer para capturar la magia del Cuerno de Oro.
Una vez en el puente, descubrirás que la mejor forma de explorarlo es caminando. La pasarela peatonal ofrece vistas del horizonte de Estambul, donde se verás monumentos como la Torre de Gálata, la Mezquita de Süleymaniye y el Palacio de Topkapi. Si llegas al amanecer o al atardecer, la luz dorada del sol transforma el paisaje en una postal inolvidable.
2. Pescadores locales
Una imagen clásica del Puente de Gálata que habrás visto en muchas ocasiones es la de los pescadores sentados a lo largo de su barandilla con sus cañas de pescar, sus gorras y mucha paciencia. El puente no sería lo mismo sin los pescadores que lo han frecuentado durante generaciones. Ten cuidado con las cañas, ya que aunque suelen ser muy cuidadosos, un descuido puede arruinar tu experiencia.
Si quieres hacer una foto con muchos de ellos debes saber que justo después de la lluvia o al amanecer es cuando más se concentran, ya que son los mejores momentos para conseguir alguna captura fresca.
3. Saborear un balık ekmek
Y si te encuentras por la zona del puente una de las cosas que no te puedes perder es el conocido balık ekmek, un bocadillo de pescado fresco que se prepara en pequeños puestos y barcos anclados cerca de Eminönü. Suele ser muy barato y es realmente un manjar sencillo pero delicioso que te recomiendo que pruebes.
4. Cenar en los restaurantes bajo el puente
Una de las zonas que más me gusta del puente es su nivel inferior en donde podrás entrar a un montón de restaurantes y cafeterías que ofrecen una amplia variedad de opciones, desde platos de mariscos frescos hasta cocina turca tradicional. Aquí, podrás ver muchos turistas para disfrutar de la comida, las bebidas y las vistas del Cuerno de Oro.
Aunque suelen estar orientados a los turistas, el ambiente es agradable, con mesas al aire libre y vistas al Cuerno de Oro. Un plan tranquilo para cuando quieres descansar y haga buen tiempo. Además, asegúrate de preguntar por el menú del día, ya que suelen ofrecer pescado fresco recién capturado.
5. Realizar un crucero en barco por el Bósforo
Para tener una perspectiva diferente lo que te recomiendo es que hagas un paseo en barco por el Cuerno de Oro o el Bósforo. En los extremos del puente, tanto en Karaköy como en Eminönü, encontrarás muelles con barcos que ofrecen recorridos que suelen ser baratos y puedes tomar fotos increíbles de ambas orillas.
Aquí tienes algunas opciones:
- Crucero-cena por el Bósforo con espectáculo
- Crucero Bósforo y Dolmabahçe
- Crucero por el Bósforo + Mezquita Azul + Santa Sofía
- Crucero por el Bósforo al atardecer
- Crucero por el Bósforo y el Cuerno de Oro
- Crucero por el Bósforo
- Crucero por el Bósforo + Bazar de las Especias
- Crucero por el Bósforo y Mar Negro
6. Disfruta del arte callejero
A lo largo del puente es muy fácil encontrar músicos callejeros y artistas locales especialmente en Karaköy. Si tienes tiempo, detente un momento para disfrutar de su talento, ya que estos pequeños detalles son parte del alma de Estambul. Puedes quedarte viendo lo que hacen o tomando fotos si te lo permiten.
¿Dónde está el Puente de Gálata y cómo llegar?
El Puente de Gálata es el que conecta los barrios de Eminönü, en el lado histórico, y Karaköy, en el lado moderno. Son los dos barrios más importantes por lo que seguro que vas a pasar por este puente varias veces antes de volver a casa.
¿Cómo llegar desde el lado histórico?
Si estás en Sultanahmet o cerca del Gran Bazar puedes caminar hacia Eminönü. Desde aquí, no solo tendrás acceso al puente, sino también a otros puntos muy interesantes como la Mezquita Nueva (Yeni Camii) y el mercado de especias de Estambul.
¿Cómo llegar desde el lado moderno?
Por otro lado, si estás en la parte moderna de la ciudad, como en Taksim o Beyoğlu, el funicular es la opción cómoda. Desde Kabataş, una breve caminata te llevará a Karaköy y al inicio del puente. También puedes optar por el histórico tranvía de la línea T1, que atraviesa zonas clave y tiene paradas en ambos extremos del puente.
Otra alternativa es tomar uno de los ferries que navegan por el Bósforo, ya que muchos trayectos tienen parada en Eminönü y Karaköy, lo que te permite admirar el Puente de Gálata desde una perspectiva completamente diferente antes de cruzarlo a pie.
Consejos para visitar el Puente de Gálata
Puedes pensar que visitar el Puente de Gálata no tiene mucho misterio, pero te aseguro que tengo para ti algunos consejos prácticos con los que puedes aprovechar al máximo tu tiempo en el puente y sus alrededores:
Elige el mejor momento para visitarlo
El Puente de Gálata siempre es bonito y puedes cruzarlo siempre que quieras, pero los momentos para las mejores fotos y vistas son siempre durante el amanecer o el atardecer. La luz dorada que baña el Cuerno de Oro y los monumentos de la ciudad crea un ambiente que no te querrás perder.
Explora ambos extremos del puente
El puente conecta dos barrios importantes como son Eminönü y Karaköy. En Eminönü, puedes visitar el Bazar de las Especias y la Mezquita Nueva, mientras que en Karaköy encontrarás calles modernas con arte urbano, cafeterías y la famosa Torre de Gálata. Si tienes tiempo lo mejor es recorrer ambos lados a pie y sin prisa..
Qué puedes ver cerca del Puente de Gálata
Como te hemos dicho a lo largo de este artículo, el puente conecta las dos zonas en las que se divide la ciudad. En cada uno de esos lados tienes un gran número de sitios de interés que puedes visitar y te los enseño a continuación:
Lado histórico:
1. Mezquita Nueva (Yeni Camii): Está muy cerca del puente y es uno de los símbolos de Estambul. Su arquitectura otomana y su ambiente tranquilo la convierten en una parada obligatoria, ya sea para entrar en ella o para hacer fotos desde el exterior.
2. Bazar de las Especias (Mısır Çarşısı): También conocido como el Bazar Egipcio por sus orígenes es un lugar pintoresco lleno de colores y aromas embriagadores. Aquí puedes comprar especias, dulces turcos, tés y productos locales en donde lo más divertido es regatear con los vendedores de los comercios.
3. Mezquita de Süleymaniye: Aunque está un poco más alejada y hay que subir la colina merece la pena visitarla. Diseñada por el famoso arquitecto Sinan es uno de los lugares que tienes que ver si estás en la ciudad durante varios días.
Lado moderno:
Torre de Gálata: Es la famosa torre de piedra que tiene en su parte superior un fantástico mirador. Además, es una de las zonas más activas durante el día y la noche con las calles que la rodean llenas de cafés, tiendas de diseño y restaurantes.
Calle Istiklal: Desde Karaköy puedes caminar hasta la famosa Calle Istiklal, una de las avenidas con más tiendas, restaurantes y un ambiente animado.